Bangkok. – La junta militar que detenta el poder en Birmania (Myanmar) elevó este sábado a 3,354 las muertes causadas por el terremoto de magnitud 7,7 registrado el 28 de marzo.
Mientras tanto, continúa la remoción de escombros y la búsqueda de desaparecidos, principalmente en las seis zonas declaradas en emergencia.
A través del periódico oficialista Global New Light of Myanmar, las fuerzas armadas informaron que habían contabilizado 4,850 heridos y 220 desaparecidos.
Al mismo tiempo, los socorristas -incluidos al menos 16 equipos internacionales- rescataron con vida a 653 personas entre los escombros durante la última semana.
La devastación que ha causado en Birmania (Myanmar) el mayor terremoto en décadas sigue siendo una «gran incógnita», reconoció la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Además, advirtió de las necesidades urgentes de miles de damnificados, como la falta de agua potable, de material médico y de refugios.
El sismo sacudió la región centro-norte del país, donde las ciudades más afectadas fueron Mandalay y Sagaing.
Los rescatistas internacionales hallaron que hay dificultad para acceder a algunos territorios debido al colapso de carreteras, puentes y edificaciones de variada índole.
